Si bien es conocido por sus diversas incursiones en el terror más ligado a lo fantástico, “The Intruder” es una historia que aborda el horror proveniente del racismo rampante en una pequeña comunidad estadounidense. A comienzos de la década del ’60, el pueblo sureño de Caxton se enfrenta a una medida progresista: una escuela “sólo para blancos” ahora recibirá estudiantes afrodescendientes. Tras la llegada del carismático Adam Cramer (William Shatner), la representación viva de la —supuesta— hospitalidad del sur, los habitantes de Caxton comienzan a seguir sus ideales racistas, usándolo como una especie de líder en la lucha contra la desegregación racial y en pos de una ciudad “libre, blanca y americana”. Sin embargo, no todo el pueblo está del lado de Cramer. Si bien la película no resultó ser el éxito de taquilla que Roger Corman esperaba, resultó ser muy bienvenida por la crítica especializada, quienes resaltaron la manera en que la historia problematiza las tensiones raciales en el sur de Estados Unidos, visibilizando las diferencias de clases entre quienes cometían actos racistas y quienes eran víctima de ello, las arengas violentas en plazas públicas —destacando de paso lo convincente del papel de William Shatner— y la crudeza que caracterizaba a los infundamentados linchamientos públicos de la época. A pesar de haber sido estrenada hace casi 60 años, algunas de las opiniones presentes en la película no difieren mucho de los ideales trumpistas que aún permanecen en el Estados Unidos de hoy en día. Tristemente relevante. Leer más…