Desde lo nuevo de Hong Sang-soo a “Shin Ultraman”: Conoce las novedades del 29º FICValdivia
A tan solo un par de semanas de su inauguración, el 29º Festival Internacional de Cine de Valdivia (FICValdivia) anunció nuevos títulos de su Selección Oficial Largometraje y la sección Gala, además de las películas que formarán parte de las categorías Largometraje Juvenil, Cortometraje Latinoamericano, Cortometraje Infantil Latinoamericano, y Nocturama, franja nocturna reservada para películas de culto.
Estos anuncios se suman a las obras ya comunicadas y a otras actividades que podrán disfrutarse, de forma totalmente presencial portando el pase de movilidad autorizado, en las salas de cine que forman parte del circuito del festival en la ciudad de Valdivia. La organización del Festival está trabajando en coordinación con las autoridades regionales para respetar todos los protocolos sanitarios, resguardando la salud de todas las personas que asistan a esta edición.
En lo que respecta a las películas ya anunciadas de la Selección Oficial de Largometraje, la organización suma ahora cuatro producciones de Argentina, Brasil/Mozambique, Canadá/Turquía y Francia/Túnez. La primera es “Sobre las nubes” (María Aparicio, 2022), un filme coral, melancólico, austero y filmado en un cuidado blanco y negro, que sigue a cuatro personajes en Argentina: el cocinero de un bar, un técnico desempleado, una enfermera de hospital público y la empleada de una librería. Cuatro historias vinculadas entre sí por la inmensidad de una urbe.
Otra de las obras que forma parte de la competencia es “Maputo Nakuzandza” (Ariadine Zampaulo, 2022), co-producción entre Brasil y Mozambique sobre Maputo, la capital de Mozambique, que comienza con jóvenes saliendo de clubes nocturnos al amanecer, gente corriendo, trabajadores que inician sus jornadas laborales, turistas que deambulan por la ciudad y los anuncios de una emisora de radio que llena las horas del día con su sonido. Una película-poema sobre la vida en la ciudad.
“A Woman Escapes” (Sofia Bohdanowicz, Burak Cevik y Blake Williams, 2022), por su parte, es una coproducción canadiense-turca que explora, al igual que la película anterior, la frontera entre el documental y la ficción, recrea la historia de una joven (Bohdanowicz) que se muda al departamento de una amiga recientemente fallecida en París. Entonces mantendrá una correspondencia audiovisual con otros cineastas (Cevik y Williams) en busca de sanación. El resultado es una obra epistolar en la que se entrelazan distintos formatos —desde 16mm a 4K— en un juego constante que se desarrolla en medio de la experiencia cinematográfica que será exhibida en 3D.
Cierra la Selección Oficial de Largometraje la película “Ashkal” (Youssef Chebbi, 2022), un thriller co-producido entre Francia y Túnez centrado en dos policías del Norte de África —una mujer joven y un agente veterano— que deben investigar un caso extraño: la inmolación de un hombre en medio de unos edificios en construcción que quedaron detenidos cuando explotó la “Revolución de los jazmines” en el año 2010.
A las ya anunciadas “The Novelist’s Film” (Hong Sang-soo, 2022), “Alcarràs” (Carla Simón, 2022), “Mutzenbacher” (Ruth Beckermann, 2022), “Pacifiction” (Albert Serra, 2022), “Magdala” (Damien Manivel, 2022) y “Fiebre” (Elisa Eliash, 2022), la organización de FICValdivia dio a conocer las dos últimas películas para la sección Gala.
La primera es “Walk Up” (2022), de Hong Sang-soo, que se une a “The Novelist’s Film” casi como complemento estético. Como en buena parte de la obra del surcoreano, la película juega con las transformaciones de la narración, cambiando el sentido del relato y jugando con las potencialidades de lo ya mostrado en pantalla. En este caso, también su personaje central es un cineasta quien, junto con su hija estudiante de diseño de interiores, visita a un amigo del oficio para conocer su amplia residencia. Allí el tiempo y la acción se bifurcan o, más bien, se reiteran y cuestionan, potenciando una puesta en escena centrada en los parámetros espaciales de la construcción en donde ocurre la acción, cuya estrechez pulcra y laberíntica se reproduce en la serpenteante estructura que adquiere del relato.
La última de las películas de esta sección es “Gigi la Legge” (2022), del italiano Alessandro Comodin, cineasta con un sentido muy libre de la puesta en escena y reacio a las definiciones de su poética. En su trabajo suele confluir el documental y la ficción y tiene una predilección por trabajar con actores no profesionales. En esa dimensión, y también en el peso que en su obra tiene el uso de los diversos dialectos, su trabajo tiene una influencia radical de Pier Paolo Pasolini, de quien, además, pareciera haber tomado la cariñosa expresividad del paisaje natural. Su nueva película, marcadamente familiar, fue filmada en la región de Friuli, donde el cineasta pasó sus primeros años de vida familiar, y está protagonizada por su tío, quien encarna a un distraído policía dedicado a labores de tránsito, quien comienza a investigar una ola de suicidios en la localidad.
Por otro lado, la Selección Oficial Largometraje Juvenil debutó en 2018, en la edición 25° y, desde entonces, ha puesto su foco en realizaciones que abordan los conflictos y temáticas asociadas a ese segmento que va entre los 13 y los 18 años. Son seis las películas que anualmente integran esta sección curada por la realizadora Tiziana Panizza.
La primera de ellas es “Holgut” (2021), documental de la cineasta belga Liesbeth De Ceulaer que cruza dos líneas de acción, aparentemente opuestas, que tienen al helado paisaje siberiano como escenario. Una de ellas sigue la aventura de dos pequeños hermanos, uno de la ciudad y otro de una aldea, que parten hacia el desierto de Yakutia para buscar un reno. La otra sigue a un científico que, en el escenario del derretimiento del permafrost como consecuencia del calentamiento global, busca los restos de un mamut con la esperanza de poder clonarlo. Ambas historias tienen como punto en común una meditación sobre la extinción.
El segundo largo en competencia en esta sección es “Kim Min-Young of the report card” (2021), de Lee Jae-eun y Lim Jisun, dupla surcoreana que aborda ese momento de transición hacia la adultez en una chica de 20 años que no ingresó en la universidad y ha optado por trabajar medio tiempo. Por ende, su eje aún se mueve en torno a sus recuerdos de la educación secundaria. En esa línea, el reencuentro con una antigua roommate, con quien había formado un club de lectura, desencadena pequeños conflictos y, en ese territorio de anhelos, cuentas por saldar y búsquedas afectivas, el filme se decanta por una construcción juguetona, irónica y profundamente cariñosa por el universo que narra.
Similar sentido hacia los personajes es el que se desprende en cada momento de “Lobo e cão” (2022), largometraje de la portuguesa Cláudia Varejão, quien prolonga su experiencia en el documental para abordar esta ficción situada en la isla de São Miguel, una comunidad en medio del Atlántico cuya insularidad le ha permitido organizarse cultural y socialmente a partir de sus antiguas tradiciones y, especialmente, con una visión ultraconservadora de la identidad de género. En ese restrictivo entorno, el filme cuenta la historia de Ana, su amigo Luis y Cloé, una canadiense que ha llegado a pasar el verano en la isla. Ellos comienzan a enfrentarse a ese estatus conservador y a remecer la moral de sus habitantes.
El dilema de permanecer o abandonar el territorio de origen es también uno de los temas presentes en “Tsumu – Where Do You Go with Your Dreams?” (2022), documental del danés Kasper Kiertzner que registra a un grupo de jóvenes LGBTQI+ que pululan en Tasiilaq, un aislado pueblo de cerca de dos mil habitantes en la costa este de Groenlandia, que registra altísimas tasas de suicidio juvenil, consumo de alcohol y abuso sexual. En ese implacable clima físico y social, Lars, Thomas y Eino intentan constituirse en medio de una atmósfera de violencia que el film mantiene fuera de campo pero que se cuela en los diálogos y en la manera en que la libertad para vestirse y maquillarse de los tres jóvenes es, en sí misma, una vía para enfrentar la enrarecida hostilidad que gravita en la vida cotidiana del pueblo.
Distinto es el caso de “Soy niño” (2022), de la chilena Lorena Zilleruelo, documental que sigue a Bastián, un joven trans de 18 años que lucha por afirmar su identidad en un proceso que la directora, prima del muchacho, comenzó a registrar seis años antes, en el momento en el que el chico detectó las primeras certezas de su identidad de género. El filme describe ese trayecto de búsqueda, dudas y descubrimiento en medio de trabas sociales y económicas y evidencia —en la intimidad confesional con que la directora se aproxima a ese itinerario— los vacíos en la institucionalidad respecto de la realidad transgénero en Chile, persistentes a pesar de los avances sociales en la manera de mirar la diversidad sexual.
La última de las películas en competencia es “Yamabuki” (2022), del japonés Juichiro Yamasaki, historia que cruza las vidas de un puñado de personajes abrumados por sus circunstancias sociales, económicas y familiares, en un pequeño pueblo montañoso. El punto de cohesión es una estudiante de secundaria que se enfrasca en realizar protestas silenciosas en el centro de la ciudad para atacar las políticas de inmigración y reclutamiento, ante la mirada atónita de su padre policía. Paralelamente, el relato se enfoca también en un ex seleccionado coreano de equitación quien, acosado por las deudas, se ha refugiado junto a su familia en esa localidad, donde trabaja como obrero en una cantera. Son dos vidas paralelas que se conectan por lo fortuito, por la soledad y por el inmenso paisaje rocoso que los une.
En paralelo a estas exhibiciones, se realizará la ya mencionada selección oficial Cortometraje Latinoamericano, la cual está integrada por catorce obras de gran amplitud temática y formal. El primero es “Cerro Saturno” (2022), del boliviano Miguel Hilari, trabajo visual que indaga en las relaciones gráficas entre naturaleza y urbe; “Copalli” (2022), del colectivo mexicano Los Ingrávidos, cinta que explora la relación con la cosmogonía náhuatl a partir de la extracción de la resina de distintas especies vegetales y los rituales que surgen de ahí; “¿Dónde está Marie Anne?” (2022), corto experimental de la peruana Yaela Gottlieb; “Gambote” (2021), de la argentina Sofía Bensadon, documental que describe la rutina de una pareja que fabrica un tipo particular de ladrillo; “Los mayores ríos se deslizan bajo tierra” (2022), cinta rodada en 16mm por el colombiano Simón Vélez, sobre una mujer que deja todo para irse a cultivar frutillas; “Luto” (2021), del argentino Pablo Weber, que narra virtualmente con imágenes fijas el relato existencial de un protagonista anónimo cuya reflexión en off se despunta a partir de la muerte de Diego Armando Maradona; “Luz Nocturna” (2022), de la costarricense Kim Torres, relato sobre tres hermanos pequeños que deben enfrentan la pérdida de su madre; “Serrão” (2021), documental del brasileño Marcelo Lin que narra las dificultades de un hombre por rehacer su vida en las favelas, y “Trazos de silencio” (2022), de la mexicana Valentina Pelayo, quien registra su viaje por Ciudad de México para hilvanar a partir de su mirada una historia de la violencia endémica en su país.
De Chile la selección incluye las películas “Geranios” (2022), de Lou Marino, drama sobre una mujer que debe adaptarse a la extravagante vida en el barrio alto de Santiago después de ser expulsada de Pudahuel; “Las criaturas que se derriten bajo el sol” (2022), de Diego Céspedes, obra con tintes de ciencia ficción sobre una mujer trans que, junto a su hijo, visita a su expareja con quien tuvo una relación tóxica; “Ninguna estrella” (2022), de Tana Gilbert, quien construye su relato a partir de las imágenes familiares que la abuela de su hijo registró durante quince años; “Quebrantahuesos” (2022), de Martín Baus, documental construido a partir de los archivos digitales de películas filmadas antes del golpe de Estado, y “Cuaderno de agua” (2022), de Felipe Rodríguez Cerda, que reflota el cuaderno de memorias de un relegado de la dictadura en la zona austral de Melinka, encontrado por su sobrina 35 años después.
En lo que refiere a la competencia de Cortometraje Infantil Latinoamericano, este año está conformada por seis películas que, en distintos formatos y técnicas, abordan temas relacionados con la naturaleza y los problemas de la niñez en la urbe. “La increíble historia del choclo gigante” (2022), del brasileño Aldenor Pimentel, cuenta una historia de amistad y confianza entre una hormiga y un oso hormiguero que tiene como telón de fondo la relación de equilibrio y solidaridad en la sabana amazónica; “El cuervo y el venado” (2022), del mexicano Mauricio Calderón Rico, también aborda la relación de amistad entre animales salvajes, esta vez entre un cuervo y un ciervo perdido en el bosque que busca a su familia; “Keradó” (2022), de los colombianos Andrés Castillo y Diego Castillo, expone la toma de conciencia de una pequeña niña respecto del peligro que el funcionamiento de una planta hidroeléctrica tiene para la sobrevivencia de su pueblo; y “Una pausa para la madre tierra” (2022), de Aldana Loiseau, que aborda cómo los daños medioambientales tuvieron una pausa durante la pandemia.
El desamparo de la niñez en la urbe moderna es el tema de otras dos películas en competencia. “Un niño sólo” (2022), del argentino Miguel Garcés, aborda las penurias de un pequeño huérfano, que apenas tiene para calentar su hogar en el invierno, y el nexo que lo unirá con una niña de clase alta que está celebrando su cumpleaños. En una línea similar, el último de los cortometrajes de esta sección es “Todos los seguidores de Ness” (2022), de la brasileña Bruna Steudel, sobre un niño que hará todo lo posible para obtener reconocimiento en el canal de internet que maneja desde su casa.
Finalmente, el equipo de FICValdivia anunció la novedad principal de Nocturama, la sección orientada a propuestas estéticas cercanas a lo bizarro y extremo revela su programación que busca rescatar obras contemporáneas que tienen todo para convertirse en clásicos de culto. En esa línea, se estrenará en Chile “Shin Ultraman” (2022), un reboot del clásico personaje televisivo japonés creado por Eiji Tsuburaya en 1966 sobre el misterioso gigante con poderes que lucha contra criaturas descomunales conocidas como la especie de la Clase S (Kaiju) que amenazan con destruir la ciudad de Tokyo. La serie original fue un éxito en todo el mundo y generó secuelas e imitaciones y, en los últimos años, numerosos productos de animación.
Esta nueva película ha sido producida y escrita por Hideaki Anno, un declarado fan de Ultraman, y dirigida por Shinji Higuchi, quien ha trabajado con Anno para “Neon Genesis Evangelion” (1995-1996), además de otros reconocidos films de anime, y que tiene una amplia experiencia en efectos especiales. Ambos retoman la estética original del personaje y narra el caos que se produce con la aparición de poderosas Kaiju que comienzan a devastar un Japón moderno. Aunque el gobierno japonés ha creado una unidad especial de combate, la SSSP, es la ayuda de Ultraman la pieza clave para hacer frente a la amenaza. Como complemento al estreno de “Shin Ultraman”, la sección Nocturama exhibirá también cuatro episodios de la serie original de 1966 pero actualizados en calidad 4K.
En su vuelta total a la presencialidad, el 29º FICValdivia contará con ocho salas destinadas a disfrutar de la exhibición de su programación. La venta de abonos para estudiantes, personas mayores y el abono general ya están disponibles online. Además, como es tradición, el evento contará con un destacado programa de funciones gratuitas y familiares. La credencial de abono permite acceder a distintos beneficios y promociones en la Red de Comercio Asociado del certamen.
El Festival Internacional de Cine de Valdivia es fundado y organizado por la Universidad Austral de Chile; producido por el Centro Cultural de Promoción Cinematográfica de Valdivia; invita la Ilustre Municipalidad de Valdivia, el Gobierno Regional de Los Ríos y Codeproval; financia el Fondo de Fomento Audiovisual, Programa de Festivales Colaboradores del Consejo del Arte y la Industria Audiovisual, Convocatoria 2021-2022 y el Programa de Apoyo a Organizaciones Culturales Colaboradoras del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio. Durante los primeros días de septiembre se pondrán a la venta los abonos. Para mayor información, te recomendamos visitar las redes sociales —Facebook, Twitter e Instagram— y el sitio web oficial del FICValdivia.
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