“Barbie” (2023): La vida en plástico nunca fue fantástica

Con una de las mejores campañas de marketing del año, Barbie (2023) de Greta Gerwig era el estreno más esperado. Inspirada en la muñeca infantil que revolucionó a la industria, la estadounidense se propone contar la historia de Barbie en su viaje al mundo real.

Protagonizada por Margot Robbie y Ryan Gosling, junto a un talentoso elenco, la historia de dos horas es un planteamiento ideológico sobre el qué y cómo es ser mujer. Porque a pesar de ser una película sobre una muñeca y sus aventuras, se escapa del género infantil, para llevarnos a través del humor, la estética, brillos y el rosa a lo que enfrentan las mujeres día a día.

De hecho, es probable es que los y las niñas no conecten mucho con lo que está pasando en pantalla, ya que la premisa es parar con las ideas de muerte que tiene Barbie, evolucionando a la pena, rabia y depresión. Y es que la directora pone a esta rubia perfecta (o como le llaman en la cinta “Barbie estereotípica”) ante los desafíos de la realidad.

Durante todo el film no hay un enemigo con poderes al que derrotar peleando en batallas fantásticas. El enemigo más grande de Barbie es la realidad. Llegar al mundo real y tener que enfrentarse al machismo, al ser mirada en menos e incomprendida, su única lucha es llegar a entender que significa ser mujer o identificarse como una, sentirse cómoda y capaz.

Punto aparte son los personajes secundarios. Es una verdad que Ryan Gosling entrega una de sus interpretaciones más destacadas desde Lalaland (2016). Ken es quien aporta el humor y también conflicto en la cuota precisa. Se roba muchas veces el foco, sin alcanzar a ser odioso, tiene el rol de bufón, pero lo eleva y nos entrega a un bufón perfeccionado al máximo.

Con el resto del elenco sucede algo similar, América Ferrera, Will Ferrell, Kate McKinnon, Michael Cera, Simu Liu, incluso Dua Lipa y John Cena, son un aporte a la narrativa, no solo una gran lista de nombres conocidos en la industria del cine para darle pompa. Todas/os tienen su momento para aportar en la narrativa de la cinta.

En cuanto a la estética, pues… ¿Hay algo más que decir que es todo muy “Barbie”? Es genial la recreación y los detalles del set y la ropa, casi en su totalidad inspirada en trajes reales de la famosa muñeca, un gran trabajo de investigación materializado en una dedicada producción.

Es inevitable no compararla con los trabajos anteriores de Greta Gerwig, y es que sigue la misma línea que Lady Bird (2017) y Mujercitas (2019), logrando con Barbie (2023) una obra sobresaliente de su trabajo al mostrarnos personajes femeninos que atraviesan cambios y se desarrollan al igual o mejor que muchos de los héroes de la ficción. Da la sensación que la marca registrada “Barbie” es solo el dispositivo del universo de ideas de la directora. Gracias a Greta Gerwig, Barbie es la heroína moderna del momento.

Barbie (2023) se encuentra en cartelera desde el 20 de julio en la mayoría de las salas de cine del país.