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“Dominio vigente” (2020): Una ficción más vigente que nunca

“Dominio vigente” (2020) es el primer largometraje formal del director chileno, radicado en Alemania, Juan Mora Cid. Con su productora, Agua Loca Films, el cineasta trae a la pantalla una historia que es contada día a día en los medios de comunicación masivos, el denominado “conflicto mapuche”.

El protagonista es Carlos Kinderman, un chileno-suizo cincuentón que llega a Temuco para reclamar y vender la única herencia que le dejó su fallecido padre, 3.000 hectáreas de un fundo en el sur. Mientras Carlos espera que los tramites y documentos se lleven a cabo para que todo quede a su nombre, y posteriormente vender, decide ir a visitar la tierra en la que nació y pasó parte de su infancia, descubriendo que su padre compartía y convivía en el extenso terreno con una comunidad mapuche. Desde ese momento se contraponen en él dos visiones, la del pueblo mapuche que usa y cuida la tierra, cercanos a su progenitor, y la de un político y empresario que quiere comprar la tierra para explotar la materia prima, echando a quienes viven en ella.

Es interesante ver como las metáforas y simbolismos se dan de una manera sutil al inicio, para luego ir tomando mayor prioridad y esclarecer la narración. En una especie de remembranza a lo que era el planeta Solaris, en la película homónima de Andréi Tarkovski de 1972, vemos desde la perspectiva de Carlos, este lugar nebuloso, que tiene vida propia y que se mueve según su sentir: la Araucanía. Y si bien parece que esta neblina y tono gris que cubre el paisaje no va a desaparecer, la claridad y luces se empiezan a notar cada vez que el protagonista convive más con la comunidad, que por años acompañó a su papá. Al contrario, cada vez que ve en la televisión imágenes del conflicto y quemas de terrenos, se desencadenan en él una serie de síntomas como visión borrosa y sordera. También hay algunas más obvias, como la oficina del senador, con una foto del dictador Augusto Pinochet en la pared vigilando el actuar del político.

Carlos es capaz de retomar y conectar con la memoria de su padre, a pesar de la muerte gracias a su relación con el pueblo mapuche, y su cosmovisión. El personaje de la Machi es vital para desarrollar esta idea durante el relato, es ella quien lo guía a entenderse y a entender como fue la vida de ese lejano pero cariñoso progenitor. Obviamente la médula de la película es la situación en la Araucanía, los problemas que existen entre el Estado y el empresariado con el pueblo mapuche por el dominio de las tierras. En este sentido es curioso que el protagonista de Mora Cid, sea un extranjero que en menos de un mes logra comprender y respetar a la comunidad mapuche, mucho mejor que quienes son los expertos y llevan más tiempo estudiando y representando políticamente el territorio de la macro zona sur por años.

Tomando en cuenta la contingencia nacional, la historia que Juan Mora Cid nos quiere mostrar, se vuelve casi un visionado obligatorio para de una vez dejar de lado el discurso oficial que se nos ha contado durante casi toda la historia de Chile como nación. El director lo hace con un estilo más lírico, algo distinto al hiperrealismo que se acostumbra a ver en lo relacionado a los pueblos indígenas. Entre sueños, luces suavizadas por la neblina, la humedad, el verde del paisaje sureño, y una banda sonora con canciones en mapudungún y algunas melodías en sintetizador, Mora Cid construye una fantasía con la capacidad de ser real.

En entrevista con Diario Concepción en septiembre del año pasado, el director penquista aseguró tener en su agenda la realización de dos películas más que hablen sobre “…el conflicto étnico en Chile…”: “Aguas Muertas” y “Raíz”, que llegarían pronto a iniciar la producción por parte de Agua Loca Films, gracias al éxito internacional y nacional que ha tenido “Dominio Vigente”.

 

 

En el contexto del 7° Festival Internacional de Cine y las Artes Indígenas en Wallmapu (FICWallmapu), “Dominio vigente” (Juan Mora Cid, 2020) se exhibirá junto a “Folil” (Ignacio Montenegro, 2020) el viernes 18 de marzo en la Sala 2 del Centro Cultural de Padre las Casas (Maquehue #1441, Padre las Casas, La Araucanía), entre las 18:00 a 22:00 horas.

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